El banco de inversión estadounidense ajusta al alza su previsión del precio del oro, citando una convergencia de factores históricos que no se veía desde hace cinco décadas: crisis geopolíticas, demanda asiática sin tregua y compras récord de bancos centrales.
El oro como refugio: una narrativa que se reactiva
En un contexto global marcado por la incertidumbre financiera, la volatilidad de las tasas de interés y el creciente peso de los conflictos geopolíticos, Citi ha elevado su pronóstico para el precio del oro, calificando este momento como “un regalo que ocurre cada 50 años”. El banco destaca que el metal precioso se encuentra en medio de una combinación sin precedentes de factores estructurales y coyunturales que lo posicionan como uno de los activos más estratégicos del 2025.

Un cóctel de fuerzas: riesgos globales y apetito asiático
El informe señala que la persistente demanda desde Asia, particularmente de China e India, ha reforzado el precio del oro más allá de lo que proyectaban modelos convencionales. A esto se suma el impacto de las compras récord de bancos centrales, que están aumentando sus reservas como estrategia de blindaje ante un sistema financiero cada vez más fragmentado. El resultado: una presión sostenida sobre la oferta, que podría llevar al oro a superar los $2,500 por onza en el corto plazo.
El oro como activo estratégico en la era postglobal
Citi sostiene que el oro está siendo revalorizado no solo como cobertura ante inflación, sino como un símbolo de soberanía financiera en una era de bloques económicos divergentes. “Este no es un repunte cíclico más: es una reconfiguración del papel del oro en las carteras institucionales”, señala el informe. El banco enfatiza que quienes comprendan el carácter estructural de esta tendencia tendrán una ventaja competitiva frente a la próxima década de disrupción monetaria global.
Redacción: Anghelo Basauri Escudero