La construcción verde es un enfoque que busca minimizar el impacto ambiental de las edificaciones mediante el uso de materiales renovables, la optimización energética y el respeto por el entorno natural.
La arquitectura sostenible ha emergido como una de las grandes apuestas del sector para reducir el impacto ambiental, aprovechando materiales renovables como la madera. Proyectos recientes galardonados en el Concurso Obras de Arquitectura de Madera21 son un reflejo de cómo la arquitectura puede vincularse con la naturaleza, promoviendo eficiencia energética y un respeto por el entorno. Obras como Casa Aleros o el Centro Náutico UACH en Valdivia, resaltan la versatilidad de la madera en estructuras que, más allá de su estética, optimizan los recursos y se integran armónicamente con su contexto.
Este enfoque se alinea con la creciente tendencia global hacia edificaciones más sostenibles. En las últimas décadas, la industria ha comenzado a tomar conciencia del impacto de los edificios en las emisiones de CO2 y el consumo energético. Soluciones como la arquitectura bioclimática, el uso de materiales reciclables y la implementación de tecnologías como la construcción modular han permitido reducir los costos y aumentar la eficiencia.
A nivel internacional, figuras pioneras como Hassan Fathy, conocido por recuperar técnicas tradicionales y materiales naturales, sentaron las bases de una construcción más respetuosa con el medioambiente. Las propiedades del adobe, arcillas y arenas secadas al sol, combinadas con sistemas de captación de aire natural, fueron sus principales aportes para lograr edificaciones adaptadas a las condiciones climáticas sin dañar el entorno.
Hoy, la madera vuelve a ser protagonista en proyectos que buscan no solo aprovechar sus atributos estructurales, sino también realzar su capacidad para armonizar con los paisajes. Proyectos como el Mirador Confluencia en la región de Ñuble o el Museo de Motocicletas MUMO en el sur de Chile demuestran cómo este material, trabajado con precisión y cuidado, no solo construye, sino que cuenta historias, revitaliza espacios y conecta al ser humano con su entorno natural.
La construcción sostenible sigue avanzando hacia modelos donde el consumo energético neto sea cero, minimizando el impacto ambiental a través del uso de energías renovables. Según un informe de la Global Alliance for Buildings and Construction (GlobalABC),se espera que para el año 2050, estas edificaciones sean la norma, impulsando una convivencia más equilibrada entre las personas y el planeta.
Redacción: Nataly Vásquez Zelaya