En un contexto donde cada vez más personas buscan opciones saludables y naturales para mejorar su alimentación, MielCochita surge como un emprendimiento que apuesta por la calidad y autenticidad de la miel de abeja cruda. Fundado en Perú, este proyecto nace de una experiencia personal transformadora, la familia de su creador, Julio Castañeda, descubrió en este producto milenario una fuente de bienestar y salud. A través de su visión de negocio, basada en la transparencia, la cercanía y el compromiso con prácticas responsables, MielCochita no solo ofrece un alimento de calidad, sino que también impulsa un cambio en los hábitos de consumo. En esta entrevista, Castañeda comparte los desafíos, aprendizajes y valores que sustentan esta propuesta, y nos lleva al corazón de un proyecto que busca llevar los beneficios de la miel cruda a todos los hogares peruanos.
¿Cómo nació la idea de crear un negocio como MielCochita?
Más que una idea, fue un propósito. Nació en mí la intención de llevar un producto natural y saludable, como la miel de abeja cruda, a más hogares peruanos. Queríamos que más familias puedan probarla al menos una vez, porque es algo que transformó nuestras vidas. Todo comenzó con mi padre, quien después de un estado muy delicado durante la pandemia, empezó a consumir miel cruda. Eso fue un cambio para toda la familia, un alimento increíble y milenario que decidimos compartir.
¿Cuál es la historia detrás de todo esto?
La historia está en nuestros videos, en Instagram y nuestras redes. Mi papá fue uno de los que estuvo en UCI durante la pandemia. Se salvó y, después de esa experiencia, hubo un cambio profundo en su alimentación, su estilo de vida y mentalidad, algo que toda la familia pudo observar. Entre esos cambios llegó la miel de abeja cruda, y de ahí surgió nuestro propósito: llevar ese producto a más personas, para ayudarles a potenciar su salud. Esa es la misión de MielCochita.
¿Quiénes fueron las personas que te inspiraron a empezar o a tomar acción?
Definitivamente, mi familia. Al inicio, ellos estuvieron ahí para apoyarme en todo. Pero si hay alguien a quien le estoy eternamente agradecido, es a mi novia. Nos asociamos el año en que fundé la empresa, y gracias a ella la empresa creció aún más. Ambos dejamos nuestros trabajos para dedicarnos al 100% al negocio, seguros de que eso haría crecer la empresa y lograr los objetivos que teníamos en mente. Marelly Robles, mi novia, impulsó nuestro crecimiento y nos llevó aún más lejos.
¿Cuáles fueron los primeros retos que enfrentaron como negocio?
Los retos son parte del camino, y hasta hoy seguimos enfrentándolos. Para nosotros, el más grande fue pasar de ser un emprendimiento a convertirnos en una empresa constituida. Es un paso simbólico que significa formalizar el negocio en todos los sentidos. Al hacerlo, dejamos de lado las dudas y nos lanzamos con toda la pasión y disciplina que esto requiere, sabiendo que sería un trabajo duro, constante y de mucho corazón.
¿Cómo han podido salir adelante a pesar de las dificultades?
La clave ha sido dividir el trabajo de acuerdo a nuestras habilidades. Tanto mi novia como yo hemos invertido en nuestro desarrollo personal para identificar nuestras fortalezas. Cada uno se encarga de lo que mejor sabe hacer. Esto ha sido esencial para asumir responsabilidades y enfrentar las dificultades, porque cada uno da lo mejor de sí en su área. Podemos tener diferencias en algunas decisiones, pero siempre aplicamos esta metodología en la que cada uno es experto en su campo.
¿Qué pueden encontrar en ustedes que no existe en otro lugar?
Nuestro enfoque en la información y la atención al cliente. Personalmente, me comunico mucho con nuestros clientes para entender sus necesidades y cómo la naturaleza puede ayudarlos. Queremos que cada persona que prueba nuestra miel sepa exactamente qué está comprando y cómo puede beneficiar su salud. Esta información es clave y viene directamente de los apicultores con los que trabajamos, lo cual añade un valor único a nuestro producto.
¿Cuál es su valor diferencial como marca?
Nuestro propósito. Nos comprometemos con nuestros clientes, llevándoles un producto que ha beneficiado a nuestra familia. La miel cruda, como siempre menciono, ayuda a potenciar la salud, y nuestra misión está en llevar esos beneficios a todas las familias peruanas. Además, nos enorgullece trabajar con apicultores asociados en Perú, quienes mantienen prácticas responsables. Nuestra marca se construye con cariño, transparencia y un profundo respeto por la naturaleza.
¿Por qué deberíamos elegirlos?
Nuestra meta es fomentar el consumo de miel cruda en general. A nuestros clientes les damos libertad de elegir dónde comprar, incluso si es con otros distribuidores o apicultores. Si conectan con nuestro contenido y deciden convertirse en nuestros clientes, estamos encantados de recibirlos. Pero nuestro objetivo está más allá de competir; queremos que el cliente se sienta libre y bien informado al consumir miel cruda.
¿Qué destaca de su idea frente a la competencia?
La cercanía con nuestros seguidores y la información que compartimos. No seguimos mucho a la competencia, preferimos concentrarnos en la información directa que recibimos de los apicultores. Nos esforzamos por mantener precios justos y ofrecer un contenido cercano, con humor y consejos prácticos. A través de podcasts, videos y otros formatos, hemos logrado conectar profundamente con el público, que ahora se ha convertido en nuestros clientes.
