En Paracas, un destino conocido por su riqueza natural y cultural, se encuentra Reserva, un restaurante que ha sabido destacar por su propuesta gastronómica única. Ricardo Chinchay, administrador del establecimiento, nos reveló los detalles detrás de este espacio que combina tradición, frescura e innovación para brindar una experiencia culinaria memorable.
La idea de Reserva surgió como un proyecto apasionado de sus fundadores, quienes buscaban elevar el estándar gastronómico de la zona. “Queríamos generar una propuesta que resaltara el valor de la gastronomía local. Con dos puertos importantes que nos brindan productos frescos como corvina, lenguado, langosta y conchas, vimos una oportunidad para crear algo único”, comentó Chinchay. Así, Reserva se convirtió en un espacio boutique que combina calidad, frescura y una experiencia culinaria integral.
Más allá de ser un restaurante, Reserva se pensó como un espacio que combina la estética visual con el disfrute culinario. Según el administrador, el diseño arquitectónico refleja la fusión de las tres cocinas que dominan su carta: criolla, nikkei y mediterránea. “Queríamos que cada cocina mantuviera su identidad y tradición, pero que al mismo tiempo convivieran en armonía. Por ejemplo, tenemos un horno artesanal para pizzas a la leña y platos como makis, ceviches, lomo saltado y pastas”, explicó.
Bajo la dirección del chef italiano Claudio Arrigoni, el restaurante ha logrado desarrollar una oferta gastronómica variada que mantiene la autenticidad de cada cocina, a la vez que propone una experiencia sofisticada y diferente.
Además de la gastronomía, la coctelería se ha convertido en un pilar fundamental de Reserva. Chinchay, quien también lidera el área de la barra, destacó el enfoque en coctelería de autor con ingredientes frescos y locales. “Nuestra carta cambia cada temporada, utilizando frutas de estación como melón, fresa, maracuyá y durazno. Todo es elaborado aquí: desde los jugos y mieles hasta los ahumados”, señaló.
El compromiso con la calidad también se refleja en el uso de piscos de confianza, provenientes de productores locales. Además, la barra ofrece tanto coctelería clásica como innovadora, adaptándose a todos los gustos.
Mirando hacia el futuro, Chinchay reveló en primicia los planes de expansión de la marca con el lanzamiento de Reserva Beach, una propuesta que combinará la calidad gastronómica de Reserva con una experiencia más cercana al mar. “Será un espacio para disfrutar del paisaje playero, con una carta variada y cócteles únicos. Estamos proyectando abrir el 28 de diciembre, aunque el lugar exacto es aún un secreto”, adelantó.
Con tres años de éxito, Reserva continúa evolucionando para ofrecer una experiencia gastronómica integral. Chinchay invita a los lectores a visitar el restaurante y descubrir todo lo que tiene para ofrecer. “Aquí respetamos las tradiciones culinarias y ofrecemos una carta variada con ingredientes frescos. Es una experiencia boutique que vale la pena explorar.”
Sin duda, Reserva se posiciona como un destino imperdible en Paracas, donde la gastronomía, el diseño y la hospitalidad se unen para brindar una experiencia inolvidable.
Redacción: Sebastián Lozada
